Joyas relucientes: ¡Aprende a limpiarlas!

Muchas veces, las mujeres optan por deshacerse de las joyas porque piensan que ya no están en las condiciones para volver a utilizarlas: se manchan, se oxidan, cambian de color o pierden el brillo. Sin embargo, aquí te damos algunos trucos sobre como limpiar joyas y prendas para que le devuelvas la vida y las luzcas como nuevas siempre que las utilices.

 

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Plata

 

La plata es un metal muy suave que se raya con facilidad y con el tiempo se vuelve negra y pierde el brillo. Para que siempre luzca como nueva, hay un truco fácil y práctico: llena un recipiente pequeño con agua caliente hasta la mitad. Coloca detergente para lavar la sopa y revuelve la mezcla hasta que se diluya. Sumerge las joyas en el envase, déjala durante unos minutos y al sacarlas enjuágalas con abundante agua fría. Seca las prendas con un paño suave y frótalas con mucha fuerza para sacarles brillo.

 

Oro Brillante

 

Al igual que la plata, sumerge estos accesorios en una solución jabonosa, pero al extraerlos debes limpiarlos con los dedos o con algún material a base de algodón. Las telas de otro material pueden contener partículas que rayan la superficie del oro. Uno de los principales mitos es emplear pasta dental o bicarbonato de sodio, pero realmente no son muy recomendables, porque son muy agresivos. Trata de utilizar un detergente que no contenga fosfato.

 

Fantasía de encanto

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Las piezas siempre poseen variedad de materiales como latón, acero, cristales y plásticos. Lo primero que debes hacer es reconocerlos para darles el cuidado apropiado. Si se trata de un metal, debes limpiar cuidadosamente la suciedad con un paño suave, ya que la superficie es delicada, y frota hasta que veas que la pieza ya está limpia. Aplica esta misma técnica para materiales como el cobre, bronce, latón y níquel para devolverles el lustre.

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.Por último, para las superficies de cristales no porosos y piedras de imitación emplea una solución suave no abrasiva y agua tibia. Restriega ligeramente con un cepillo de dientes de cerdas suaves o una toalla muy delicada.

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